martes, 22 de abril de 2008

Ficomic 2008

Una pequeña muestra de personajes

En el cada vez es más variopinto Ficomic te puedes encontrar a personajes de lo más curiosos por doquier. Algo que se respira en el ambiente es que la edad media del de los paseantes es cada vez menor sobretodo por la entrada imparable de los mangas que hace que puedas encontrarte gothic lolitas aquí y allá e incluso los personajes de tus videojuegos favoritos. El comprador que iba a l'estació de França en antiguas ediciones con su barriguita y sus aspecto desaliñado no ha desaparecido pero pasa desapercibido entre la multitud de menores de edad que se rascan los bolsillos. En definitiva se me hace extraño el Saló en un espacio tan mal distribuido: vacío en muchos sectores y abarrotadísmo en la zona grandes editoriales, zona de firmas y pasillos repletos de frikadas para todos los gustos.
Pese a todo me quedé con un buen sabor de boca tras la visita fugaz. A destacar los dibujos de Michael Golden: impresionantes sus trazos, asombrosa la complejidad de sus dibujos y la gran cantidad de detalles y increible su arte para captar momentos llenos de acción, por no hablar de la gran maestría con que utiliza la paleta de colores mezclando tonalidades complementarias. También los originales de Drácula de Luis Scafati me parecieron increíbles y dignos de una exposición mucho más amplia (no sé si alguien ya había disfrutado de la lectura de La metamorfosis o El gato negro acompañado con los geniales trazos negros de Scafati, pero si no es así os los recomiendo encarecidamente). Y por último la sorpresa de
Miguelanxo Prado ya que es una pena que unos originales tan tremendamente preciosos que pude disfrutar en la expo se vean tan desmejorados debido a la pobre animación de De Profundis.

Una servidora que se enamoró de esto

Lo que necesitavamos al salir

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Para releer no hay nada mejor que las versiones o adaptaciones. De Kafka me he leído todas sus novelas y algunos relatos. Me anotado el flechazo.

Fraentic dijo...

debo decir que disfruté como un gorrino en el salón, me dejé la pasta en comics fetiches (lobo, moebius) y me quedé alucinado con la exposición esa del laberinto del fauno-hellboy.

Impresionantes, también, los originales de De Profundis, es un alivio para un dibujante en desarrollo (como yo) ver que aun hay cabida para el lapiz, la tinta y el papel, que con tanto Photoshop me estaba asustando.

Un saludo

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